Hay momentos de la vida en la que podemos sentirnos superados por alguna situación que no sabemos cómo resolver. Esto puede provocar un descontrol emocional que produce un enorme desgaste y a veces llega a ser insoportable. La terapia nos ofrece las herramientas necesarias para afrontar muchos de los problemas que van a surgir a lo largo de nuestra vida.
Pero ¿en qué momento deberíamos acudir a un profesional? Estas son algunos rasgos de comportamiento que indican que deberías acudir a un psicólogo en Montuïri o al más próximo en tu localidad.
Un psicólogo nos puede ayudar mucho cuando tenemos un estado de ánimo muy bajo y no sabemos por qué. Nos sentimos apáticos, desmotivados, no comprendemos la vida ni nuestro lugar en el mundo. Además, no tenemos ganas de levantarnos por las mañanas, salir a la calle, asearnos o cumplir con nuestras obligaciones cotidianas. Se trata de un estado diferente que va más allá del típico día de bajón, en los que no tenemos ganas de nada y estamos estresados o cansados.
Los problemas de autoestima son demasiado frecuentes y es motivo suficiente para ir a un psicólogo en Montuïri. Las personas con baja autoestima se sienten inferiores a los demás, con un mal concepto de sí mismas y tienen un miedo excesivo al rechazo. Además, son inseguras y evitan el conflicto, lo que les lleva a tratar de complacer a los demás, ignorando incluso sus propias necesidades o preferencias.
Algunas etapas de la vida son realmente complicadas y como no tenemos un libro de instrucciones no sabemos con afrontarlas. Duelos, divorcios, rupturas amorosas, problemas laborales, crisis familiares, son problemas frecuentes y por los que posiblemente vamos a pasar todos. Por eso debemos aprender a manejar todas las emociones asociadas a estas situaciones. Así mismo, las personas que han sufrido momentos de un fuerte impacto emocional como malos tratos, abusos, accidentes, etc. deben ponerse en manos de un profesional cuanto antes para poder reparar el daño emocional y recuperar la estabilidad psicológica para poder volver a tener una buena calidad de vida.
Hay personas que tienden a ser muy impulsivas y no son capaces de controlar sus conductas. En ocasiones incluyen malos hábitos, adicciones, peleas o conflictos, y aunque se puede racionalizar, en estos casos no se reúne la voluntad suficiente para recuperar el control. Generalmente esto suele ser un síntoma subyacente de un problema más profundo que hay que identificar para abordarlo correctamente.
Estos son algunos motivos importantes para comenzar una terapia de ayuda con un psicólogo en Montuïri.
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