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Es normal tener miedo a ir a un psicólogo la primera vez. Al fin y al cabo, es algo totalmente nuevo para nosotros y eso siempre puede generar cierto temor e inquietud. Además, en una terapia tenemos que abrirnos y compartir nuestras preocupaciones más íntimas con una persona desconocida, y algo así requiere valor. Por eso es importante encontrar un psicólogo en Muro o en otro municipio, que nos haga sentir relajados y confiados.
Hubo un tiempo en el que la salud mental estaba relacionada con manicomios, habitaciones acolchadas y camisas de fuerza. Por suerte, eso está más o menos superado y sin embargo aún existen demasiados estereotipos que hacen que nos de vergüenza admitir públicamente que nos encontramos en tratamiento psicológico. ¿Por qué? Principalmente se debe a un desconocimiento que perpetúa el estigma de que las personas asistidas por un psicólogo tienen algún tipo de problema.
Se sigue pensado que las personas que necesitan ayuda tienen un serio desequilibro, y eso hace que el paciente sienta temor al rechazo y por ello, o bien descarta la posibilidad de recibir terapia, o bien acude al psicólogo de forma clandestina.
A la vez que ese miedo por lo que vayan a pensar de nosotros, se une otro temor, el de que nos encasillen como personas débiles, incapaces de superar las dificultades e incompetentes para afrontar dificultades. Algunas personas que asumen que han de recibir ayuda psicológica lo ven como un fracaso personal. Como una incapacidad por su parte para gestionar su propia vida. Otro motivo que lleva a muchas personas a ocultar que están recibiendo terapia, es que contarlo significaría reconocer abiertamente que en sus vidas están sucediendo cosas negativas que no son capaces de manejar.
Superar todos estos prejuicios y el miedo al estigma, requiere un ejercicio de valentía, que merece un gran reconocimiento. No es fácil superar los prejuicios sociales y el miedo al qué dirán. Es fundamental que el paciente que finalmente decide aceptar la ayuda de un psicólogo en Muro, lo haga con el convencimiento de que necesita que un profesional le guíe para resolver sus problemas emocionales. Las personas que van por obligación no están receptivos ni dispuestos a colaborar en su propio tratamiento por lo que la terapia no será efectiva.
Por todo esto, y por la incertidumbre de cómo nos vamos a sentir mostrando nuestra vulnerabilidad a una persona que no conocemos, es normal sentir temor y ansiedad ante la idea de ir a un psicólogo. Pero el terapeuta es un profesional que sabe crear un ambiente de confianza y no nos va a juzgar ni a reprender. Su labor es ayudar a rebajar esa angustia para que podamos expresarnos con facilidad.
Una vez vencido el miedo a acudir a un psicólogo en Muro, todo será mucho más fácil.
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